“Alegrémonos, llenémonos de gozo y alabémoslo, porque ha llegado el día de la boda del Cordero” (Apocalipsis 19:7 TLA).
Sí, probablemente tú leíste “ha llegado el día” y pensaste: Pero hace mucho tiempo estamos predicando que Jesús está por regresar, que llegó la hora, y todavía no vino. Y muchos antes de nosotros esperaron y trabajaron para que esto sucediera en su generación y no sucedió. Entonces, ¿por qué ahora sería el momento?
Detente y piensa en el mundo de hoy. Ahora responde la pregunta: ¿Crees que a este ritmo llegaremos lejos? ¡El mundo está en caos! Las señales del fin están sucediendo a una velocidad tan irreal, que hasta los que no conocen sobre el regreso de Cristo han declarado que no podremos vivir mucho más en esta tierra. ¡Finalmente, está llegando el día! Jesús pronto vendrá y se nos exhorta a que terminemos la obra que comenzaron nuestros antepasados.
Dios llama a sus jóvenes para actuar en los momentos finales de la historia y está convocándote a ti para que asumas tu papel en este momento. El Espíritu Santo está siendo derramado sobre los que aceptan el desafío y se entregan al Señor para ser instrumentos en su Reino y sus testigos a todo el mundo (Hechos 1:6-8). Es un llamado para hoy, ahora, no podemos esperar más. No solo debemos hablar, sino vivir un cristianismo auténtico, verdadero, genuino en la práctica. Llegó la hora de estudiar más la Biblia, Llegó la hora de buscar más al Señor en oración, Llegó la hora de tener una vida más saludable, Llegó la hora de tener relaciones más puras, llegó la hora de hacer más amistades para el Reino de Dios, Llegó la hora de predicar más de nuestra esperanza, en fin: ¡Llegó la hora!
¿Y tú? ¿Aceptas el llamado para ser usado por el Señor y cumplir sobre todo su voluntad? Entonces, respóndele hoy a Jesús “¡Yo voy!”. Vamos a terminar la obra juntos, vamos a usar todos los recursos disponibles para ir a dónde Dios nos mande, y Cristo pronto vendrá ¡en nuestra generación!
¡Maranata! El Señor viene pronto. ¡Amén!